ES SABIDO DE LA NECEDAD VUELTA INVISIBLE

Es sabido de la necedad vuelta invisible.
Fernando Galeana Padilla.

Cuantas razones para convertirme en alguien que no soy, las odiseas personales abundan en el imaginario compartido, son hazañas de otros que invaden la identidad.

Se vuelven confusiones los diálogos en los lugares comunes, las palabras son de unos y otros, son frases repetidas.

Cuántas envolturas tiradas de esos artículos que se anuncian en la principal caja electrónica, los productos consumidos que consumen nuestras vidas.

Nos burlábamos de las “sociedades colectivas” que vestían uniformemente y nosotros emprendimos igual con diseños a la moda.

Se busca en los libros de autoayuda, en los tutoriales para atravesar la calle y convertirse en millonario, para de un día a otro lograr lo que implicaría leer y comprender sesiones maratónicas de lecturas y clases de filosofía.

Las redes sociales son la mina de los que carecemos de creatividad y vida interesante, son el refugio de la ociosidad para justificar no tener horarios de lectura.

Decir esto es complicado, te compromete, se juega uno la apuesta de varias cosas con los familiares y amistades.

Yo pienso escribiendo y hasta ahora no cambiaré nada de esto, continúo diciendo lo que pienso que no es mucho ni satisface a nadie, pero entonces para que tener momentos con uno mismo.

El caso es ser congruente, seguir las convicciones, indagar las dudas, no hay que convencer a nadie, es sabido de la necedad vuelta invisible.

¿Habrá razones, serán los desperdicios de un día insólito esperando algo que es improbable?

¿Quién sabe por dónde viene la lucidez si es que está en camino o alguna vez se generó esa posibilidad?

En el ámbito de la creación cada uno escribe lo que quiere, esa libertad es frágil, pero existe, ahí me atengo, lo demás si se parece con algún otro escrito, me da gusto, es innegable.