DESDE ESE SOL
DESDE ESE SOL
Por Fernando Galeana Padilla.
Desde ese Sol que despierta dispongo la esperanza
un mar se extiende en el horizonte abriéndose al cielo
de infinitos sueños.
Desde este espacio que no por reducido se limita, juega la vida implacable
entre sus flores e insectos, con actitud optimista.
Desde las frecuencias transitando llegan a los dispositivos, mensajes de nuevo día,
atraviesan la atmósfera, rebotan desde los satélites a las repetidoras, a los oídos del corazón.
Desde cualquier parte estoy comunicado, me asigno un horario para enfrentar los desafíos, grabo los pendientes que requieren mayor tiempo, comparto sabidurías ancestrales, las asimilo primero.
Vuelve mi atención al día que transcurre en vivo, se ajustan los cocos a las palmas para no soltarse tiernos. Me tomo uno, desayuno, siento la energía costeña, la brisa levantada, el juego de palabras que saluda.
Retumban las olas que me siguen, cantan como siempre generosas, sus letras son poesía, veo la belleza resplandeciente, me atrevo a escribir sobre la arena, pasan volando las gaviotas, al fondo entre el azul del agua y del cielo posan los delfines, saltan, saltan, es el amor costeño anunciándose en febrero.