EN ESOS TERRITORIOS
Pasos de una sonrisa disfrazada,
Ojos que asomados, se estiran,
las ligas rojas, van hinchadas,
adornando la reacción acostumbrada.
Todos y todo son apariencias engañosas,
cubren el horario del deseo artificial de la pastilla,
la sustancia verde, la blanca,
los colores confundiendo lo que siento.
Llevo el rostro agarrado,
lo sostiene una voluntad perversa,
me duele, también me gusta
como el olvido aparente que motiva.
Detrás de tantas muertes
camino con la propia,
me acostumbro,
me vuelvo cínico,
como tú que dices ser mi amigo.
La hipocresía crece, se espejea
en las ropas que me visten,
antes oía más voces,
advertencias,
recomendaciones,
poco a poco se callaron.
No escucho mas allá de una tacha,
el aliento de un tinnher o una bacha;
las manos sinceras se perdieron,
desconozco las mías.
El cuerpo camina como nudo,
va apretándose como el hambre cada día:
La cuenca de los ojos se agranda,
la misma mirada se achica.
Siento ahora la sonrisa floja,
difícilmente se acomoda,
se va notando que es postiza,
perdió su fuerza, su naturaleza.
Voy perdido en ese laberinto
que me asfixia,
ya no oigo nada,
avanzo entre el miedo y el rechazo,
quiero que mis ojos encuentren la conciencia.
Apuesto a mi mirada perdida,
apuesto a una hora
en que las voces lleguen,
apuesto a no morir en este desafío.
Esta voluntad que va surgiendo,
quiere ser libre,
en el silencio grita ayuda,
se arropa bien con su tristeza, se esconde.
Voy con los pasos que pesan,
con las circunstancias,
con los temblores,
en esos territorios
donde un día elegí perderme.
GAPFER