NO ERAN LOS PÁJAROS
No eran los pájaros.
Fernando Galeana Padilla.
En el envase de la inocencia quedó el recuerdo, círculos se pintaron en distintos momentos.
Los más coloridos fueron al ver tu rostro, esa sonrisa indicando todo dio el comienzo.
La felicidad se animó con trazos amplios, la llevadera narrativa cogió ímpetu.
No eran los pájaros los que volaban, éramos nosotros, ni siquiera tú sabías, era yo y la imaginación de estar contigo.
Por las playas donde nos sentamos realmente en un tiempo de la historia verdadera, el mar nos aceptó.
Lo demás fue tiempo soñado, una eternidad que dolió hasta soltarse, un buen día deje de hablarte, de pensarte.
Tú tenías la distancia terrenal de hacer tu normal vida, nostalgias por un instante me siguieron dominando.
Sigue la cuenta y los números nuevos te conocen, nos ven con la insípida forma de ignorar al loco.
Se fue la señal ayer por una nube, jugó las formas de una belleza triste, iba mi vida sin ti despejándome de toda duda.
GAPFER
Dicen que de poeta y loco tenemos un poco, yo animado en mi locura, gusto de escribir desde hace algún tiempo. Ahora mismo comparto contigo en este espacio que nos junta con el mundo, la amorosa reflexión en esta obra sencilla, en la que encontrarás la profundidad de un corazón latiendo en la creativa escritura que emana como sonrisas festivas. Te agradezco por visitar las veces que desees esta boya que indica algo en el océano inmenso de las letras, como la cercanía a un Puerto de poetas donde las palabras son las olas que llegan refrescando el alma. Yo soy a lo corto y a la distancia solo un puente entre el corazón y el pensamiento que hacen de el espíritu creativo la oportunidad para liberar al ser humano e integrarse plenamente. Te abrazo fuertemente por ser ese buscador que encuentra y llega tocando con los brazos abiertos de su inquietud humana. GAPFER.
