Poema

HASTA QUE SE ME ANTOJÓ SU FRUTO.

HASTA QUE SE ME ANTOJÓ SU FRUTO.
Por Fernando Galeana Padilla.

No había pensado en el almendro
hasta que se me antojó su fruto,
recordando mi niñez, los atrevidos
momentos en que me trepaba
para alcanzar las almendras más altas y
mancharme todo, comiendo al por mayor,
con una falta de culpa,
con la sonrisa tan natural que,
se convirtió en la vida;
quizás extrañamente,
como llamada de atención,
me arrojó un almendrazo
el divagado pensamiento.

Octubre 25 de 2018

 

Dicen que de poeta y loco tenemos un poco, yo animado en mi locura, gusto de escribir desde hace algún tiempo. Ahora mismo comparto contigo en este espacio que nos junta con el mundo, la amorosa reflexión en esta obra sencilla, en la que encontrarás la profundidad de un corazón latiendo en la creativa escritura que emana como sonrisas festivas. Te agradezco por visitar las veces que desees esta boya que indica algo en el océano inmenso de las letras, como la cercanía a un Puerto de poetas donde las palabras son las olas que llegan refrescando el alma. Yo soy a lo corto y a la distancia solo un puente entre el corazón y el pensamiento que hacen de el espíritu creativo la oportunidad para liberar al ser humano e integrarse plenamente. Te abrazo fuertemente por ser ese buscador que encuentra y llega tocando con los brazos abiertos de su inquietud humana. GAPFER.