SOFOCANTE CALOR
Huyendo del calor, coqueteo a una palmera, refugiado en sombra amable escucho las olas, revientan los enojos, los humores aquejan, humedad de la piel que se evapora;
Admiro a los zanates, vuelan costereando, cantan, bailan frente al sol, vestidos con una sombra glamurosa, protectora, de hermoso plumaje.
Danzan en la arena, buscando y encontrando vida, aceptando todo, es bueno, no se quejan, disfrutan la playa, les adorna un garbo al caminar y al retomar su vuelo.
El mar que visualizo al fondo saluda su agitada brisa, suspiro al deleitar un coco enamorado, vigoriza mis sentidos, oh piel suave, condensa el paraíso en su frescura.
Otro ambiente acariciándome, sonrío al pasado reciente, este momento es formidable… Un silencio.
Lento tiempo ahora, me detiene, lo respiro, sostiene fuerte espíritu, una sombra resucitó al moribundo.
Entre olas, pieles, agua de coco, la naturaleza me incorpora, desintoxica los humores, vuelven las carcajadas y cantamos todos, los zanates.
GAPFER.
Con afecto a las y los Costeños. Saludos.
Julio 18 de 2014.