Poema

LIMPIAR LA CASA.

Para qué quemar los cielos, se desgajan solos los improperios, un soplido resquebrajó los bajareques de los cerdos, por el lobo.
Paralelo a la tristeza llega la impotencia, se apersona el coraje, la angustia  anticipó el espacio al sufrimiento.
Impunidad reventando la cuerda que brincaba a gusto, merecerán los demonios sus idioteces. Larga noche cerrándose,  agonizando fiestas, culturas diversas incomprendidas  que dan miedo, resistiré a la ignorancia común de mis congéneres y tomaré la iniciativa.
No hay porqué tirar culpas al cielo, resiste frustración matutina, el día comienza como siempre, la existencia resuelve todo.
Dejaré de asquearme muy temprano, aun queda espacio en el sendero, puedo resolver limpiar la casa y luego el basurero.
GAPFER.
01/Octubre/2014.

Dicen que de poeta y loco tenemos un poco, yo animado en mi locura, gusto de escribir desde hace algún tiempo. Ahora mismo comparto contigo en este espacio que nos junta con el mundo, la amorosa reflexión en esta obra sencilla, en la que encontrarás la profundidad de un corazón latiendo en la creativa escritura que emana como sonrisas festivas. Te agradezco por visitar las veces que desees esta boya que indica algo en el océano inmenso de las letras, como la cercanía a un Puerto de poetas donde las palabras son las olas que llegan refrescando el alma. Yo soy a lo corto y a la distancia solo un puente entre el corazón y el pensamiento que hacen de el espíritu creativo la oportunidad para liberar al ser humano e integrarse plenamente. Te abrazo fuertemente por ser ese buscador que encuentra y llega tocando con los brazos abiertos de su inquietud humana. GAPFER.