PARA NUNCA SER RECORDADO
Para nunca ser recordado.
Fernando Galeana Padilla.
Entre la marea de mierda y el tufo que revienta se despiden ellos, los de la autoridad, el poder de no hacer nada, los de la vista gorda, los que están preparados para recibir quejas y dineros mal habidos, ni taparse la nariz o el cubre bocas aminoran los hedores, solo el paisaje y la gente que se baña en su ingenuidad por las playas pasan como un descuido frágil que se va acostumbrando cada tres años cuando el barco parte del puerto para nunca ser recordado.